Menos de tres semanas después de llegar a San Diego, el tiempo de Robinson Canó con los Padres ha llegado a su fin.
El club envió a Canó a Triple-A El Paso el jueves, pero rechazó la solicitud y se convirtió en agente libre. Para reemplazar a Canó en la lista, los Padres seleccionaron al jardinero Nomar Mazara.
Designado para asignación por los Mets el 2 de mayo y liberado solo unos días después, Canó firmó con los Padres el 13 de mayo.
El club esperaba que el ocho veces All-Star pudiera, al menos, darle un impulso contra los lanzadores derechos. Pero en 12 juegos en San Diego, ha conectado para .091/.118/.091. Obtuvo una base por bolas en comparación con 10 ponches, y su WAR de -0.9 en FanGraphs es el segundo peor entre los jugadores de posición de las Grandes Ligas.
A principios de esta temporada, Canó bateó .195/.233/.268 en 12 juegos con los Mets, quienes le deben más de $40 millones del resto del contrato de 10 años y $240 millones que firmó con los Marineros. Si este es el final para Canó, terminará su carrera con una línea de .301/.351/.489 y 335 jonrones.
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