
“Terroristas entrenados en el Norte de Santander (Colombia), en la población de Chinácota, como lo han declarado ellos (los detenidos).
Sabemos y tenemos el lugar donde se entrenaron estos grupos”, declaró Maduro en cadena oficial de radio y televisión.
Explicó que los “terroristas” se hacían llamar “grupo número 2, grupo bravo” en sus comunicaciones internas y recibieron órdenes de sobrevolar dos drones con cargas explosivas para atentar contra su vida y la de los jefes políticos y militares que le acompañaron el sábado en la tarima durante un acto público.
En tanto, dos excandidatos opositores a la presidencia, Henri Falcón y Henrique Capriles, insistieron ayer en una “negociación” con Nicolás Maduro.
Capriles planteó que Maduro debe “abrir un proceso de negociación” con la oposición con “acompañamiento internacional” y que tenga una “agenda clara”.
El Parlamento
— Una investigación
El Parlamento venezolano, de mayoría opositora, pidió ayer una investigación “seria, objetiva, imparcial y conclusiva” sobre el atentado con cargas explosias del que salió ileso el sábado el presidente Nicolás Maduro.
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